En el mundo del diseño es muy frecuente el uso del adjetivo ATEMPORAL, que alude a aquello que está más allá del tiempo, es decir, que pese a los cambios de estilo e intereses logra trascender la barrera del tiempo con reconocimiento continuo a lo largo generaciones.
George NELSON, el diseñador y arquitecto que le impregnó carisma al mueble de los años cincuenta, fue también un visionario de la oficina moderna que se enfocaba en crear «una colección permanente diseñada para satisfacer plenamente los requisitos para la vida moderna». Sus obras son hoy apreciadas piezas que dejan ver un espíritu vitalista e innovador.
Entre muchas de sus destacadas obras, encontramos el famoso sofá Marshmallow. Diseñado en 1956 junto con Irving Harper, es uno de los primeros diseños de muebles del Pop Art. Su original forma y estructura, lo han convertido en una de las piezas más reconocidas de la historia del diseño.
Charles y Ray EAMES (Arquitecto/Pintora y Diseñadora), son unos de los pocos creativos que pueden presumir de haber abarcado, con consistencia y éxito, una gama tan sorprendente de áreas relacionadas a las artes.
En 1956, crearon su primer sillón para Herman Miller: el emblemático Eames Lounge, tapizado en piel. El Lounge de dos piezas aún se califica como «una obra maestra del diseño industrial» y como muchos de sus productos, permanece en fabricación desde entonces confirmando una vez más la contemporaneidad de su diseño.
El diseño traspasa fronteras así como el tiempo, tal como hizo el aclamado escultor japonés Isamu NOGUCHI, quien diseñó una de las mesas más icónicas en el mundo. Conformada por 3 sencillas piezas de cristal y madera, en 1944 la Mesa Noguchi ganó su lugar dentro del mundo del diseño gracias a su estilo único comprendido por sus piezas suspendidas en el aire.
Esta mesa es considerada por algunos especialistas como una escultura, más que como un mueble. La pieza combina a la perfección la sutileza de líneas orientales con la funcionalidad occidental. En la actualidad se sigue fabricando.
Ellos son solo una muestra del amplio el portafolio de diseñadores de los años 50´s que gracias a su ingenio crearon una vasta gama de obras, con las cuales proporcionaron diseños únicos y atemporales, una gran variedad de entornos, tanto residenciales como corporativos, elegantes y casuales que siguen siendo apreciados y valorados en nuestros días.
La búsqueda permanente de la atemporalidad de los diseños que marquen nuevas etapas y tendencias y que trasciendan en las generaciones, es el reto permanente de los profesionales en sus distintos campos (arquitectura, interiores, diseñadores gráficos, de modas, etc…). De ahí que el valor de estas piezas sea más por conservar una pieza atemporal que por la pieza como ornato. El gusto por las grandes obras es el respeto a su originalidad y esfuerzo, a la calidad de sus materiales, al legado que los hace vivos a través de los tiempos. Conoce más de éstas y otras icónicas obras del diseño en KREA Espacios distribuidores autorizados de Herman Miller en Nicaragua.
Publicación en la 15va Edición Estudio 505: https://issuu.com/estudio5050/docs/15va_edci__n__web_/44